Diario de un clown de hospital

¡No es así!

Cuando llegamos ese martes a la UCI, una niña pequeña, postrada en una de las camas del servicio, ya nos seguía con la mirada sin que nos diéramos cuenta.

Nuestra querida enfermera Eli nos contó su caso. Se llamaba Araceli y hace algún tiempo había sido diagnosticada de Fibrosis Quística. Debido a esta enfermedad crónica, su aspecto era de una nena de 4 años como mucho, pero la muchachita tenía 6 añitos. Había tenido una crisis, por eso, la habían ingresado. Sus padres no se ocupaban demasiado de ella ni venían a verla a menudo, ya que tenía muchos hermanitos más.

Mi compañera, Beni Cilina (Nuria Urioz) y yo comenzamos un acercamiento suave con mi marioneta-pez, musiquita y pompas de jabón… pero justo en ese momento, llegó la fisioterapeuta dispuesta a comenzar su sesión de ejercicios para su rehabilitación. Araceli estaba triste y un poco deprimida. No parecía muy dispuesta a hacerle caso. La especialista comenzó a proponerle movimientos con los brazos, pero Araceli ni se inmutó.

Sin dudarlo un segundo, comencé a mover mis extremidades caóticamente y probé a conectar con la niña diciendo:

– “Mira, a mí me sale muy bien”. La pequeña me ignoró. Aunque no suele gustarme demasiado desafiar a los niños, me arriesgué:

– “Seguro que Araceli no lo sabe hacer”.

Fue entonces cuando Araceli salió de su silencio e inmovilidad y cansada de verme hacerlo tan mal, me dijo:

– “No es así.”

Y comenzó a hacer el esfuerzo que se le proponía. Yo jugué la sorpresa:

– “¡Anda, a Araceli sí que le sale bien!”

A partir de ese instante, cada vez que la terapeuta le proponía un ejercicio, yo hacía una mala imitación. La pequeña se reía y me corregía, mientras nosotros nos sorprendíamos y la felicitábamos. Había comenzado la diversión, la risa… ¡y la sesión de rehabilitación! Increíble. Nos marchamos a visitar al siguiente niño, contentos y orgullosos de nuestra aportación.

Sergio Claramunt (Dotor Max Recetax)

Max Recetax y Beni Cilina con guitarra y ukelele