En una de las habitaciones de la 5º planta del Hospital General de Alicante, en el servicio de Lactantes, se encontraba Javier de 2 años con su papá. Antes de entrar en su cuarto decidí sacar a Lolo, el loro (la marioneta que ese día había decidido llevar en mi bolsillo).
Mi compañera de ese día, La Doctora Pili Dora (Paqui Noguera), entró buscándolo, pero Lolo comenzó a jugar al escondite: aparecía y desaparecía por detrás de su cabeza, en un hombro, en el otro… provocando las risas de Javier y su padre. Una vez que Pili Dora encontró por fin al loro, comenzó a cantar una dulce canción, al tiempo que Lolo le hacía la música silbando. Fue muy bonito para todos, además del nacimiento de un nuevo mini número para los niños pequeños.
Al finalizar la jornada, el pasillo estaba vacío, pero entre el silencio inconfundible del hospital sobresalía una melodía silbada… era el papá de Javier, que llevaba un buen rato silbando.
Me fui a casa con una íntima sonrisa.
Quique Montoya (Doc Tornillo)